Santo Domingo R.D.- Incertidumbre, dolor, angustia, manifestaciones de pesar desgarradoras se vivió desde la mañana del lunes 27 de noviembre del 2006 en la discoteca Jazzys Elite de la Avenida España y en la sede de Patología Forense tras un incendio que dejó un saldo de 9 empleados muertos de ese centro de diversión.
El fuego de la discoteca ocurrió la madrugada de ese lunes y perdieron la vida seis mujeres y tres hombres.
Según versiones las mujeres bailaban desnudas. Ocho de las víctimas fueron halladas en la segunda planta del edificio. El Instituto Nacional de Patología Forense identificó los cuerpos de las nueve personas que fallecieron en el incendio.
Según Santo Jiménez, director de Patología en ese momento, los cuerpos llevados hasta ese recinto pertenecían a Meidy Laura Cleto (Mabel), de 21 años y oriunda de Boca Chica, Rosanna Marianela Maldonado (Laura), también de 21 años y de Boca Chica.
Los tres hombres eran Pedro Rodríguez, de 23 años con residencia en Hato Mayor, Isacc Céspedes (El Lobo), de 22 años, de San Juan de la Maguana, y John César Padilla, peruano, de 38 años, residente en la capital.
Las otras chicas eran María Dolores Fernández Pichardo (Paola) de 24 años, de Santiago; Digna Antonia Santana Leonardo (Jessica), de 20 y residente en Hato Mayor; Sara Severino Sánchez (Mónica), de 23 años, residente en Boca Chica, y Johanny del Carmen Aquino (Stefany), también de 23 años y residente en Boca Chica.
El local estaba cerrado por dentro y por fuera, lo que obligó a los bomberos a romper las puertas. Otra versión fue que el fuego lo produjo un corto circuito. Las víctimas eran todas empleados del referido centro de diversión. Sin embargo, las autoridades detuvieron, para fines de investigación, al guardián del edificio, Bienvenido Félix Pérez, de la compañía Pantera, y al administrador Wilkin Casado.
Nunca se determinaron las causas del incendio.
Las víctimas murieron asfixiadas con monóxido de carbono. El incendio se inició en la segunda planta del negocio propiedad del arquitecto Jesús Gilberto Pérez Borge quien dijo que optaría por no reconstruir el centro nocturno.
“No tengo motivación de ninguna clase para volverlo a reconstruir, no lo haría porque esas personas eran muy queridas para mí”, precisó. Durante una conversación por teléfono con el Listín Diario en 30 de noviembre del 2006, expresó que el centro nocturno no estaba asegurado debido a que se había vencido en abril de ese año el contrato de la aseguradora.
Investigación
A petición del fiscal de la provincia de Santo Domingo de ese momento, Perfecto Acosta, la jueza Marcia Raquel Polanco, dictó un año de prisión preventiva contra Jesús Pérez Borge, propietario del centro de diversión, y contra el administrador Wilkins Casado Patricio. Fueron sometido a la justicia porque en las investigaciones del incendio en la discoteca Jazzys Club se determinó que el negocio violaba el artículo 334 del Código Penal y la ley 137-03 sobre trata de personas.
Los imputados de realizar actos de proxenetismo en discoteca incendiada, reafirmaron su inocencia ante los alegatos que le acusan, y dijeron a Diario Libre, que ambos estaban fuera de la provincia de Santo Domingo el día del siniestro que le costó la vida a nueve personas, razón por la cual fueron detenidos.
Pérez expresó pesar por la muerte de sus 9 empleados (3 hombres y 6 mujeres) tras insistir en negar que en ese centro de diversión se practicara la prostitución.
“Es extremamente trágico este accidente, es una cosa que ni en mis peores sueños me lo hubiese imaginado” expresó en ese momento.
La discoteca no volvió a abrir sus puertas en la avenida España, pero tiempo después se abrió una con la fachada parecida y de nombre Jazzys Night Club en bávaro.